2018 - Feliciano - Oeconomicae et pecuniariae quaestiones: el documento completo del Vaticano sobre la economía mundial

El bienestar debe evaluarse con criterios mucho más amplios que el producto interno bruto (PIB) de un país, teniendo más bien en cuenta otros parámetros, como la seguridad, la salud, el crecimiento del "capital humano", la calidad de la vida social y del trabajo.

--- Sí. Correcto, existe el Indice de Desarrollo Humano que mide esto mismo



Sin embargo, es asimismo evidente que ese potente propulsor de la economía que son los mercados es incapaz de regularse por sí mismo:[28] de hecho, estos no son capaces de generar los fundamentos que les permitan funcionar regularmente (cohesión social, honestidad, confianza, seguridad, leyes…), ni de corregir los efectos externos negativos (diseconomy) para la sociedad humana (desigualdades, asimetrías, degradación ambiental, inseguridad social, fraude…).

--- No. Los mercados suelen regularse por sí mismos, los mayores desastres vienen de la intervención Estatal. Ahora el Estado tiene otras funciones muy importantes que son las seguridad y el castigo a los que violentan a otras personas etc..

*

14. No es posible, además, más allá del hecho de que muchos de sus operadores están animados individualmente por buenas y correctas intenciones, ignorar que en la actualidad la industria financiera, debido a su omnipresencia y a su inevitable capacidad de condicionar y – en cierto sentido – de dominar la economía real, es un lugar donde los egoísmos y los abusos tienen un potencial sin igual para causar daño a la comunidad.

--- No. La industria financiera es una parte muy importante del sistema capitalista que está sacando de la pobreza a millones de personas. Hay abusos y egoísmos como en todos lados pero mientras no violenten la ley las personas son libres con su patrimonio de comprar, vender, especular, repartir o hacer lo que crean más positivo para sus vidas.


Por ejemplo, comercializar algunos productos financieros, en sí mismos lícitos, en situación de asimetría, aprovechando las lagunas informativas o la debilidad contractual de una de las partes, constituye de suyo una violación de la debida honestidad relacional y es una grave infracción desde el punto ético.

---- No podemos regular el mercado con lo que creemos que es ético o no, porque eso varía mucho, se necesitan una reglas de juego, unas reglas claras que indiquen que hasta aquí es legal y hasta aquí no y por lo tanto es castigable.


- Se entiende así la exigencia, cada vez más advertida, de introducir una certificación de las autoridades públicas para todos los productos que provienen de la innovación financiera, al fin de preservar la salud del sistema y prevenir efectos colaterales negativos. Favorecer la salud y evitar la contaminación, incluso desde el punto de vista económico, es un imperativo moral ineludible para todos los actores comprometidos en los mercados. Esta exigencia demuestra asimismo la urgencia de una coordinación supranacional entre las diferentes arquitecturas de los sistemas financieros locales.

---- No, lo que tiene que hacer las autoridades públicas es no rescatar a las empresas que vendan productos contaminados